Artçiculo de: Concha Canoyra y Viviana Konstantynowsky. Concha es Directora Gerente en S.E.K y UCJC (Universidad Camilo José Cela) y Viviana, CEO & Founder de Kamaljit, empresa desarrolladora de proyectos de Internet.
Se ha hablado mucho durante estos días (de marzo) de la mujer, de su importancia en la sociedad, de los avances conseguidos y de lo que nos queda por lograr en este mundo todavía masculinizado y donde los progresos en el camino de la igualdad se consiguen poco a poco, fruto de un esfuerzo constante y diario, titánico, pero retribuido en ocasiones sólo por pequeños logros.
Asisto en general a los foros donde se debaten estos temas siempre que mis responsabilidades como mujer ejecutiva y madre de tres hijos, que vive entre dos despachos y que trabaja en una destacada organización, me lo permiten.
Suelo compaginar mi faceta profesional, mi vida familiar y mis intereses culturales, políticos y sociales. Y se puede. Es difícil pero se puede. Y es enormemente gratificante el dedicar una parte de tu tiempo a ayudar a otras mujeres a que al menos se conciencien de que hay que avanzar. Por todo ello creo que es importante no sustraerse a participar en debates, escribir artículos, unir esfuerzos creando redes, colaborar en asociaciones, trabajar y trabajar en este camino hacia la igualdad. Porque todo suma.
Se habla mucho de la importancia del "mentoring" entre nosotras, de la necesidad de ayudarnos con un "coach" que nos enseñe a enfocar nuestra vida y a diseñar nuestro camino, de la importancia de que mujeres referentes aporten su experiencia a otras que no han podido conseguir sus sueños.
Pero al final y aunque todo ello es importante, el crecimiento personal de cada un@ de nosotr@s depende, en gran medida, de nuestro enfoque vital para abordar los grandes o pequeños proyectos de la vida. De esa ilusión y optimismo que nos permite ser felices haciendo lo que queremos o lo que podemos, de la lucha diaria por analizar nuestro interior y valorar nuestras potencialidades, de la necesidad de querernos para que los demás lo perciban y nos valoren. De la autoestima que te permite tomar el control de tu vida y aportar.
El optimismo al encarar nuestro día a día nos ayuda a eliminar las barreras, cuanto menos emocionales, que nos encontramos en el camino. La convivencia con personas empáticas, que transmiten energía positiva a su alrededor nos reconforta, especialmente si se trata de líderes influyentes capaces de abrir nuestras miras y transformar perspectivas.
Porque esa transmisión de emociones positivas genera sensaciones que potencian la autoestima y nos motivan a seguir con nuestra" pelea diaria " y batirnos por lo que realmente queremos. Porque con seguridad en nosotras y junt@s podemos.
Con ilusión, con esfuerzo, con vitalidad, con entusiasmo y con ayuda de las Instituciones, que tienen que establecer de manera urgente y prioritaria los mecanismos legales y las políticas de conciliación e igualdad que permitan "que se haga camino al andar", todos y todas construiremos un mundo sin barreras ni techos de cristal para nuestra hijas en donde no se tenga que celebrar el día de la mujer, como no se celebra el día del hombre. El mundo de los sueños hechos realidad.
Fuente¿Qué te parece si te suscribes al blog? Recibirás gratuitamente las novedades en tu correo y podrás darte de baja cuando quieras. Lo puedes hacer desde el apartado "Seguidors" que encontrarás en el margen superior derecho del blog. ¡Muchas gracias!
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada